Irène Némirovsky y la economía de textos
en su novela “David Golder”
 
         
    por Carlos Pensa  
       
   

     Diré algo a propósito de la novela DAVID GOLDER (1) denominación de la obra a que se refiere el título de esta nota, comenzando por una breve recorrida de opiniones sobre el tamaño o volumen de los libros:

     • Me comentaron, algunos libreros, acerca de clientes que al momento de adquirir una novela toman el ejemplar y con su mano la pesan como calculando cuánta ficción se llevarán; o de otros que miraban el final del libro para saber qué cantidad de páginas adquirían para su goce como lectores.

     • Se atribuye a Virginia Wolf (o Virginia Woolf o Virginia Wolff) -1882-1941- estas expresiones, dichas con alegre ironía, sobre los libros y sus usuarios: “…el Todopoderoso le dirá a Pedro (no sin cierta envidia) al vernos llegar con libros bajo el brazo: ¡Estos no necesitan recompensa, son los amantes de la lectura!

     Pero no todos aprecian de igual modo los libros.

     Relátanos José M. Paz: (2)

     “Yendo el ejército hacia el Alto Perú (hoy Bolivia), los militares forman tribunales de recaudación para conseguir fondos para la campaña, pero gran parte se la apropian los jefes, oficiales y tropas (en fraude al objetivo), Paz recuerda “que tres jefes emprendieron el negocio y supieron de un depósito (creían caudales) en cierta casa. La hicieron desalojar para mudarse ellos. De la excavación encontraron una abundante librería, haciéndola encajonar y enterrar. Dichos jefes no eran afectos a la lectura y maldijeron el hallazgo,” (3)

     Los eruditos recuerdan que la diferencia más comúnmente aceptada entre una novela y un cuento es su extensión, ya que novelar permite contar todo puntillosamente, en cambio el cuentista abrevia la narrativa (practica la economía de textos) dejando sugeridos o imaginables muchos componentes del relato que se podrán reelaborar a partir de aquello dicho en los capítulos. Al respecto es oportuno evocar palabras de Maria Granata. (4)

     “…Estoy cómoda en la novela, en ella hay todo el espacio posible y yo necesito mucho espacio…” (5)

     Estos comentarios introductorios me llevan a resaltar elogiosamente la brevedad, o sea la poca cantidad de páginas utilizadas para escribir la novela DAVID GOLDER por Irène Némirovsky, más aun, cuando el tiempo relatado en la obra es muy extenso, las particularidades de los personajes aparecen minuciosamente descriptas y los lugares se ven gracias al discurso narrativo de la autora. Así sucede allí magistralmente: la historia desarrollada es rica en informaciones coloridas dibujándose las escenas con tal claridad que se las puede suponer visualizándolas cinematográficamente. Se disfruta de una prosa acertada en tan sólo 150 páginas con tipografía muy legible y abundantes espacios libres, que evitan la pesadez de las hojas sobrecargadas o con sus capítulos amontonados: leyéndola estaremos presenciando el triunfo de la economía de textos. El tratamiento de los múltiples actores de la obra es profundo y claro lo que permite conocerlos muy bien gracias al recurso del pensamiento dinámico y dialogante que tan bien utiliza Némirovsky.

     DAVID GOLDER, figura central del relato, es un luchador audaz e incansable, además de salvajemente pragmático cuya única pasión es la de hacer fortuna una y otra vez pagando sólo con su vida que es miserable, vacía, solitaria y decadente. Excelente, atrapante y por momentos conmovedor resulta el muestrario de situaciones que ofrece Némirovsky quien, sin fraseos innecesarios, logra,insisto, una claridad inigualable.

     Si bien la vida de DAVID GOLDER no es para nada ejemplar, ni logrará ganar la simpatía del lector, la descripción final de su muerte puede ser emotiva.

     Acceder a este libro permitirá al lector encontrar otros muchos aspectos literariamente interesantes.

 
         
         
      NOTAS  
      (1) David Golder. Ediciones Salamandra. Barcelona, 2006.
(2) José M. Paz: militar y escritor Argentino (Córdoba 1791-Bs. As.1854). Venció a los caudillos Bustos y Quiroga. Hecho prisionero consiguió huir a Uruguay donde organizó la defensa de Montevideo contra Oribe. Caído Rosas fue ministro de Guerra.
(3) Libro “Memorias” (“Memorias de la prisión en la época de Rosa”) Centro Editor de América Latina, Bs. As. 1971. Página 28.
(4) Maria Granata: nacida en Buenos Aires. Su primera publicación es de 1942 y además de poesías y novelas tiene alrededor de 30 libros para los más chicos.
(5) Diario La Nación de Buenos Aires, 15-05-1988, secc.4ª. Página 2.
 
         
      Publicó revista "Poligono de cuentistas y poetas" de Buenos Aires en su número 43 de mayo de 2009.  
     
 
Posterior a esta publicación llegó a mi escritorio la revista-libro PROA de marzo-abril 2010 con un trabajo (cuya lectura completa recomiendo) del escritor Miguel De Loyola que él tituló "Irene Nemirovsky, poeta de la prosa" y de allí reproduzco un párrafo luminoso:

"La pluma de esta hábil narradora ruso-francesa deslumbra hoy en nuestros días, haciendo justicia a su obra. Hay tal agudeza en ella para narrar, para escarbar en la conciencia de sus personajes, que cuesta convencerse que hubiese pasado desapercibida por la crítica durante casi 50 años..."

C.P.